En la presentación de la novela, en pequeño grupo que muy meritoriamente asistió al taller, se pudo debatir el carácter simbólico de la novela, su característica y estilo genuinos, "diferente" dijo Lorenzo, bibliotecario, tres de las asistentes confesaron haberlo leído dos veces para poder entender. Coincidiendo en el impacto que produce su lectura. El arquetipo de sirena como ser maléfico que la autora recupera y la diosa Kali que generalmente se la conoce como ser violento, mujer negra o también como representación de la madre regeneradora. Todo ello pudo preguntársele a la autora sacando ella explicación y símbolos femeninos ancestrales. Confesó Inmaculada valerse de los símbolos para sacar de sí misma a modo de exorcismo vital sus propios monstruos. Aurora Gámez consideró la novela como obra de arte, igualando el libro a autores como Kafka en lo narrativo y Vicente Alexandre en la prosa poética. "Es un libro para volver a leerlo, tiene muchas lecturas y en cada una de ellas descubres cosas nuevas". Inmaculada fluye entre el existencialismo Kafkiano y el vitalismo que le proporciona su cultura andaluza y su caracter luchador. Se vislumbra así su propio estilo ya en ésta su primera novela y por ver está lo que nos tiene deparado el destino literario de Inmaculada. El debate en petit comité propició acercamiento desnudando su ser de escritora además de la oportunidad de profundicar en los distintos relatos de la novela ¡un verdadero lujo! Se comentó la impresión cuando se lee " la venganza o ajuste de cuentas de una Diosa", "la descripción impactante de sentir el propio nacimiento comparándolo con la Metamorfosis de Kafka, la figura como objeto de culto y se coincidió en que estimula el pensamiento y a próximas lecturas que sin duda se producirán por el estado de ánimo en que acabamos el taller.Desde ALAS se agradece a Carmen Sánchez Melgar por la organización del acto y a la Biblioteca Municipal por proporcionar el espacio adecuado.
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